El tricotado hace tiempo que dejó de ser una manualidad ‘de abuelas’ para convertirse en una herramienta creativa muy útil en manos de todos los amantes de la moda que se preocupan por la sostenibilidad y el consumo responsable. Cada vez más personas se expresen a través de esta labor táctil que nos enlaza con nuestro lado más esencial y primigenio. En los meses otoñales, cuando el calor estival ha desaparecido, son muchos y muchas los que desempolvan sus ovillos y agujas. Para serviros de inspiración os presento a Svanhild Stroem, una diseñadora de las islas Feroe, cuyo trabajo actualmente se centra en el tricot de ese archipiélago del Atlántico o Norte y que es famoso por su gran calidad, su belleza y su simbología.
Svanhild está especializada en productos tejidos a mano con lana de las islas Feroe.
Pero empecemos conociendo la industria del punto de las islas Feroe. “Tejer ha sido algo habitual durante generaciones en las islas. Nunca desapareció como ocurrió en otros lugares donde hoy en día es recordado como algo que hacía una abuela. En las islas Feroe la lana, y los artículos de punto realizados con ella en tiempos fueron considerados como la moneda más valiosa. La gente tejía para sí misma pero también a cambio de comida en la tienda”. Cuenta Svanhild, Es más, “Alrededor del tejido se ha creado una próspera cultura con reuniones y festivales de tejido. Tricotamos para nosotros mismos y como regalo para los demás. Hoy en día es común que todos los niños que comienzan la escuela reciban un ‘suéter escolar’ tejido a mano, una manera maravillosa de mantener viva la cultura del tricotado”.
Svanhild ha trabajado durante 20 años como diseñadora de moda y desarrolladora de productos en varias empresas pero hace unos años, decidió centrarse en el punto de las islas Feroe, publicando libros y abriendo, junto a su madre Marjun, la tienda Svanhild, donde desarrollan nuevos modelos a mano inspirados en prints y formatos antiguos además de realizar charlas y compartir sus experiencias. En la tienda online de Svanhild se pueden comprar interesantes artículos tejidos para hombres y mujeres de todas las edades.
Revalorizar el punto tradicional
Pero… ¿Cómo surgió en Svanhild su interés en la punto tradicional? “Crecí tejiendo a mi alrededor. Mi madre, tías, abuelas y bisabuelas tejían. Las prendas de punto hechas en casa eran comunes en aquella época, la ropa confeccionada era un lujo. Me enseñaron a tejer cuando tenía 6 años. Comencé con una bufanda para mi muñeca. Cuando tenía 12 años, hacía suéteres para mí y para los niños de la familia. Tejer estaba tan normalizado, que en la escuela nos permitían sacar la labor en clase mientras escuchábamos a nuestra maestra”. No es de extrañar que su herencia familiar le haya servido de bagaje en su etapa emprendedora. “La casa de mi abuela estaba decorada con tejido tricotado. Ella guardó todos los suéteres gastados, que eran demasiado buenos para desperdiciarlos, y los convirtió en otra cosa, como una almohada, una manta o unas cortinas… Estábamos rodeadas de punto”.
A izquierda y derecha, dos modelos del Jersey de pescador de Svanhild.
Aunque antaño se tejía por necesidad, actualmente el tricotado es una artesanía revalorizada y elevada a la categoría de lujo. “Creo que es muy importante que nos centremos en las múltiples artesanías que están a punto de desaparecer. La idea de nuestro libro era resaltar nuestro punto porque tiene numerosos patrones únicos de las Islas Feroe. Afortunadamente, hoy en día se presta mucha atención al tejido artesanal y cada año, se organizan más cursos y se publican más manuales. Pero hay muchas otras artesanías en peligro que merecen nuestra atención: sólo hace falta una generación para que una artesanía desaparezca para siempre”.
En el libro Faroe Islands Knits, además de diseños para que la gente reproduzca en casa, Svanhild habla de tradiciones e historia popular… Este viaje editorial ha supuesto un gran enriquecimiento personal y profesional. “Aprendí mucho en el proceso y me abrió los ojos a cosas que de otra manera no habría visto. Lo que más me llamó la atención fue el valor que la lana y los artículos tejidos a mano tenían en la sociedad de antaño. Cada pieza era utilizada hasta que no quedaba nada que heredar, limitando así nuestro conocimiento de los textiles de las islas. Esto es un gran contraste con lo que he experimentado mientras crecía y con lo que soy hoy. Durante muchos años, la mayor parte de la lana de las islas se quemó cuando llegaron al mercado chaquetas de forro polar u otros tejidos técnicos. Ahora la industria describe la lana como la fibra más tecnológica ¡De alguna manera siento que he cerrado un círculo completo!”.
A izquierda y derecha, jerséis de Svanhild tricotados a mano decorados con motivos autóctonos.
Para acercarse a los gustos de las nuevas generaciones, Svanhild lleva a cabo una estrategia particular. “Es importante tener un enfoque lúdico hacia nuestra herencia para mantenerla viva y por eso uso los patrones de maneras no tradicionales para sugerir a los demás a usarlos”. La inspiración es importante para la creación y a Svanhild le funcionó muy bien a la hora de publicar su primer libro. “Encuentro inspiración en culturas y tradiciones extranjeras y a menudo, eso me hace ver mi propia herencia bajo una luz diferente. Esto siempre está conmigo en cualquier proceso creativo. Además, reunimos mucho material de artículos, libros y museos y dedicamos mucho tiempo a leer documentos antiguos de exportación e importación a las islas. También entrevistamos a mujeres mayores para escuchar sus historias de cómo crecieron con la lana y las prendas de punto que hacían, tan diferentes a las actuales. Una de las revelaciones del proceso fue el parecido de un suéter estampado tradicional de las Islas Feroe con los suéteres de punto de seda franceses del siglo XVIII. Esto demuestra que siempre nos hemos inspirado en lo foráneo”.
Para acercarse a las nuevas generaciones, Svanhild les ha dado un toque lúdico.
Abrir la tienda online Svanhild fue el siguiente paso. “Tener una plataforma en Internet es una excelente manera de contar tu historia y de llegar a personas de otros países. Comencé con un sitio web pero luego creé la tienda debido al gran número de personas que querían comprar nuestros libros y suéteres. Luego agregamos productos de ‘do it yourself’ y actualmente tenemos clientes de todo el mundo que quieren tejer nuestros diseños. Es sorprendente cómo la gente encuentra el camino hacia nuestro pequeño universo”. Recientemente también abrieron una tienda física en una pequeña casa de 1878 en su ciudad natal, Kvivik. El espacio que mejor enmarca la singularidad de sus diseños.
El jersey de pescador
Pero hablemos de las que son, sin duda, las estrellas indiscutibles de Svanhild: los jerséis. Disponibles tanto para hombre como para mujer, el más popular es el Jersey de pescador, de cuello alto y formas rectas y cómodas que están decorados con pequeños patrones repetidos. Esos dibujos tienen una simbología que entronca con la historia y las costumbres del archipiélago. “Los patrones utilizados en las Islas Feroe también se ven en otras partes del mundo sin embargo, los hemos usado a nuestra manera. Nuestros suéteres generalmente están adornados con el mismo patrón pequeño repetido el el cuerpo y en las mangas lo que da como resultado un interior de hilos flotantes. Esto proporciona un gran aislamiento y hace que la prenda sea extra cálida y perfecta para nuestro clima”.
Los dibujos de los jerséis de Svanhild tienen una simbología que entronca con la historia y las costumbres del archipiélago.
Los dibujos tienen sus propios nombres feroeses según a qué se parecen o desde qué lugar se usaban comúnmente. “Se cuentan historias de tiempos pasados en los que las fincas o las familias tenían su propio patrón, y no estaba bien visto copiar los patrones de los vecinos. Muchos de mis diseños están inspirados en antiguas historias sobre mujeres feroesas adelantadas a su tiempo, esto siempre me ha fascinado, por ejemplo, Elin, una mujer soltera que se ganaba la vida tejiendo ligas y tirantes”.
Para fabricar los productos, Svanhild cuenta con un equipo de tejedores locales que tejen los suéteres que se muestran en su tienda online. Y además, aceptan pedidos por si es necesario adaptarse a una talla especial. Aparte de eso, también trabajan con un gran equipo en Portugal que produce otros de sus productos como lo calcetines de lana y los zapatos hechos a mano. “Me encantaría poder impulsar más la economía local pero aún estoy lejos de lograrlo”, poco a poco.
La lana feroesa
Es curioso porque en estas islas entre Escocia e Islandia, la población de ovejas es mayor que la de personas. “La oveja de las Islas Feroe es una raza autóctona y su lana es muy diferente a la lana merina. Debido a las duras condiciones climáticas, en las que siempre hay viento y lluvia, las ovejas han desarrollado una lana perfecta para este tipo de de clima. Sus vellones están llenos de lanolina que lo hace impermeable al agua y mantiene calientes a las ovejas. La lana exterior está formada por fibras largas y gruesas mientras que las fibras interiores son más finas y suaves. Desafortunadamente, durante muchos años ha habido poca demanda de lana de las Islas Feroe, lo que provocó que los pastores la quemaran. Sin embargo, ahora vemos un gran cambio. Una de las razones por las que escribimos nuestro libro fue arrojar luz sobre la lana como recurso. Experimenté con muchas mezclas de lana para darle un nuevo aire a los jerséis tradicionales, pero también ofrecemos en nuestra tienda jerséis cien por cien lana feroesa. En comparación con los suéteres de lana merino, a algunos les pica en contacto con la piel, pero a nosotros nos encantan”.
A la izquierda, el primer libro de Svanhild. A la derecha, lana de las islas Feroe.
En cuanto a las agujas, se utilizan las mismas que se pueden encontrar en cualquier parte del mundo dependiendo del grosor de la lana elegida. “En las Islas Feroe solían fabricarlas de madera o de hierro. Era muy habitual que las niñas tejieran juntas un suéter ¡Se sentaban una frente a otra con el suéter entre ellas y podían llegar a tejer hasta con doce agujas!”.
Sacar el artista que llevamos dentro
Además de los jerséis de pescador, en Svanhild se pueden adquirir chaquetas, vestidos, gorros, ponchos, calcetines… “Como creativa de la firma trabajo constantemente en nuevas ideas y afortunadamente, no hay fin”. Además, ofrecen un kit de iniciación para realizar unos patucos en los que no faltan las agujas y los ovillos de auténtica lana de las islas Feroe. “Las pantuflas de un solo color eran una de las cosas más comunes para aprender a tejer. Las pantuflas estampadas no son lo más fácil para empezar, pero son un pequeño proyecto rápido que puedes llevar discretamente en el bolso. Creamos este kit para brindar a las personas de lejos la posibilidad de familiarizarse con la lana de las Islas Feroe, que no es fácil encontrar en el extranjero”.
A izquierda y derecha, las pantuflas de Svanhild perfectas para iniciarse a trabajar con la lana feroesa.
Una prenda hecha a mano es una apuesta por la artesanía, la sostenibilidad, la temporalidad… en definitiva, un tipo de consumo muy alejado del prêt-à-porter convencional y del perjudicial fast fashion… y ese es también uno de los objetivos de Svanhild. “Desafortunadamente, los últimos 40 años de moda rápida nos han alejado del respeto por la ropa que solíamos tener. Hoy en día, la mayoría de la gente espera que la ropa sea barata, por lo que está mal confeccionada y, por tanto, es irrespetuosa. Hacer un suéter tejido a mano lleva horas y nunca se puede vender barato. Espero que se vuelva a recuperar ese respeto por la artesanía y los productos hechos a mano”.
Los expertos dicen que tricotar tiene muchos beneficios físicos (reduce el estrés y la ansiedad, previene la artritis…) pero también nos ayuda a conocer la moda desde otra perspectiva, lejos del consumismo masivo, y más centrada en la creatividad que todos llevamos dentro. “La belleza de tejer es crear tú mismo una prenda con las manos y un hilo, punto a punto. Es un estado de atención plena. Puedes tejer lo que quieras y hacerlo exactamente como desees. Dedicar horas de trabajo a una prenda la hace especial, ya que le has dedicado parte de tu tiempo vital… y le has dado vida”. Por eso, y por muy perfecto que quede el resultado, nunca será igual un jersey hecho a mano que a máquina.
Svanhild Shop. Uppi í Trøð 1. FO-340 Kvívík. islas Feroe.