Hace un tiempo os hablaba de los Himmeli que Loreta Lichtarovičienė realiza de forma artesanal el Letonia pues bien, hoy voy a hablar de un tipo de adornos muy similares a los Himmeli realizados en Polonia por Matki Folki, un creativo dúo de artesanas que crean las Pająki que traducido del polaco significa ‘arañas’. “Ciertamente tienen mucho en común pero no sabemos si tienen el mismo origen. Las arañas polacas también se crean a partir de formas de paja a las que se les añaden muchas decoraciones coloridas. Si observamos las similitudes, podemos suponer que las arañas polacas y las Himmels son parientes cercanos”.
Maria Nowaczyk y Maria Hnatejko-Sokołowska son las fundadoras de Matki Folki, una firma artesanal de Poznan (Polonia) centrada en la artesanía tradicional y por supuesto, en la creación de Pająki. Y, ya que son su producto estrella… ¿Qué son los Pajaki? “Las arañas son estructuras ligeras y coloridas suspendidas del techo. En el pasado estaban hechas sólo de paja pero con el tiempo, se les añadió papel de colores y pañuelos de papel. Pueden estar asociados con atrapasueños. Se suponía que su forma ahuyentaría las fuerzas del mal de la casa y la araña misma, que giraba bajo el techo, traería felicidad y prosperidad a la casa. Cada anfitriona quería crear la araña más hermosa posible para deleitar a los invitados y brindarles alegría”.

Las Pająki combina diferentes materiales como la paja o el papel.
Aunque en el pasado las Pająki se colgaban en las estancias de las casas por un motivo especial actualmente tienen una función meramente ornamental. “Antiguamente se creaba una nueva araña para cada Navidad y Semana Santa, y también se colgaban en eventos importantes, como bodas, en la sala principal de la casa. Ahora se los considera una decoración para mantener durante todo el año. Se adaptan tanto a interiores de estilo rústico como a interiores industriales modernos”.
El folclore es artesanía y cultura
A Matki Folki le preocupa mucho el futuro de la tradición… “Es importante mantener la continuidad de los logros de las generaciones anteriores. Eso nos hace crecer como sociedad y hacernos únicos. Por eso estamos muy interesadas en contribuir a que las tradiciones locales no desaparezcan en favor de tendencias globales”. Y también le interesa el lado artesano del folclore. “Lo que más valoro del folclore es el color y la sencillez de las formas. Esculturas creadas por artistas aficionados que son objetos bellos y auténticos, únicos”.


Las ‘arañas’ o Pająki tienen una similar función a los atrapasueños.
Su interés por el folclore y lo artesanal fueron motivos suficientes para comenzar a fabricar Pająki. “Desde la infancia, a ambas nos ha fascinado el arte popular que se ve en los museos al aire libre y en los museos etnográficos. De hecho, una visita obligada en cada viaje que hacemos es visitar un museo local o una galería de arte popular. Una vez, en una conversación, resultó que ambas estábamos enamoradas de las arañas populares. Empezamos a buscar información por Internet sobre cómo crearlas y finalmente, nos decidimos a hacer la primera. Aunque estuvo lejos de ser perfecta, creemos que es hermosa y todavía cuelga en el dormitorio de Maria. Luego fue muy fácil, creamos más y finalmente decidimos presumir ante el mundo”.
Artesanales cien por cien
Sus Pająki están realizados a mano. “Todos ellos están creados con pasión y gran precisión”. Y son muy laboriosos porque su tarea comienza recolectando paja de los campos y cortándola en trozos pequeños. “Luego preparamos los ingredientes: cortamos círculos de papel, enrollamos el papel de seda para crear bolas ligeras llamadas ‘kalinki’ (‘kalinka’ es una especie de flor, el ‘viburnum’). Luego ensamblamos la araña en un todo enhebrando los elementos posteriores en un hilo grueso. Todo este proceso nos produce una gran satisfacción y ver la araña terminada siempre despierta en nosotras grandes emociones”.


Al ser un objeto artesanal ninguna ‘araña’ es igual a otra. Todas son diferentes.
Hay que señalar que las Pająki no tienen unas normas estrictas de fabricación. “Las arañas populares tradicionales tenían en el pasado varias formas. Las más populares se parecen al cristal y se parecen más a los himmeli nórdicos. Toda la estructura estaba formada por pequeños cristales de paja y dependía del creador qué forma adoptaría finalmente la araña”.
Al ser un artículo hecho a mano, ninguna araña que sale de sus manos es igual a otra que hayan hecho anteriormente. “Creamos una versión moderna de arañas y las basamos en un aro de metal, pero por lo demás son bastante similar a sus ancestros tradicionales. Usamos paja, papel de seda y papel, a veces agregamos cuentas de semillas de guisantes. Nunca hemos hecho otra araña idéntica a las anteriores, aunque algunas nos gustan tanto que probablemente tendrán una gemela. Recientemente nos preguntaron si podíamos hacer una lámpara de araña con una bombilla en el medio… ¡Nos gusta este desafío y tenemos la intención de lograrlo!”.
Ante todo, educación
Aunque existen piezas más asequibles fabricadas de forma industrial, está claro que no es lo mismo que las hechas a mano. “En nuestra opinión, el arte popular siempre se defenderá. Por supuesto, el mercado está lleno de productos idénticos y baratos pero creemos que siempre habrá un grupo de entusiastas, como nosotras, que valoran la autenticidad de los artículos artesanales. Ninguna de las decoraciones producidas en masa se puede comparar con artículos hechos a mano. Cada uno de ellos tiene alma y es único. Es muy importante educar y promover el arte popular para que la mayor cantidad posible de personas tengan la oportunidad de enamorarse de él; esta es una de nuestras misiones”.


Encima de la cuna o de una mesa, al lado de una lámpara… Las Pająki hacen que las estancias sean más acogedoras.
Para valorar el trabajo de los artesanos es agradable conocerlos, saber de primera mano cómo se ha hecho el producto o el cariño y las horas que han puesto en ellos. Una de las formas más comunes últimamente es ir a pop ups y a mercadillos artesanales. Matki Folki suele participar en ellos. “Allí muchas personas ven nuestras arañas por primera vez y, gracias a nosotras, han conocido esta hermosa tradición. También hemos establecido contacto con gente que trabaja en instituciones culturales. Nos han pedido que realicemos talleres para niños y adultos ya que el interés por las arañas va en aumento. Gracias a nuestra participación tenemos la oportunidad no sólo de vender arañas sino también, promover esta idea”.
Una de las claves para que los objetos tradicionales artesanales no desaparezcan es la educación. Y de eso Maria Nowaczyk y Maria Hnatejko-Sokołowska saben mucho porque ambas, son profesoras de profesión. “En la escuela se habla mucho de historia y de arte, pero se ignora el arte popular ¡Esto es un error y debe cambiarse! Además, la organización de festivales en museos al aire libre, talleres y eventos locales tienen la posibilidad de hacer más visible el arte popular. Nos alegra comprobar que las decoraciones tradicionales aparecen cada vez con más frecuencia en las revistas y en los grandes portales centrados en el interiorismo. La sociedad es cada vez más consciente. En Polonia incluso los artículos locales y tradicionales se han puesto de moda y esperamos que se difundan cada vez más. Gracias a webs como Folkmania, tenemos la oportunidad de conocer tradiciones de otros países y elegir artesanía local cada vez que queremos llevarnos un recuerdo de un viaje, en lugar de llevarnos un imán de nevera producido en masa en una gran fábrica”.
